Escribo esto casi un año después de las que posible sean las mejores vacaciones de mi vida con una pareja. Jamás pensé que me vería escribiendo un relato, pero los días pasan y los detalles se pierden y si hay algo que no quiero olvidar fue aquel fin de semana en la costa malagueña.
Mi pareja y yo nos sacamos algunos años de diferencia yo tengo 32 y ella 24, y por mala suerte para nosotros ese año lo pasamos separados, cada uno trabajando en una ciudad distinta, apenas nos veíamos los fines de semana y pocas veces con el tiempo suficiente para las ganas que nos teníamos.
Después de tener que cancelar otros planes para el verano debido al COVID, decidimos, aunque sea aprovechar unos días en un hotel en primera línea de playa, donde tener intimidad, salir a cenar, a echar unas copas y bailar; y por supuesto, follar como si el mundo se acabara.
Mi chica que se llama Lola, es bastante vergonzosa a la hora de hablar de temas referentes al sexo, cosa que luego una vez en faena se le olvida y se desinhibe totalmente, por así decirlo es como un animal encerrado en una jaula o al menos así lo veía yo.
Las semanas previas a las vacaciones, echamos muy buenos ratos follando imaginado como serían esas noches por allí, como quería follar, donde, que iba a llevar puesto, etc. En la cama y follando era el único momento donde podía sacar con cuenta gotas toda esa información.
El finde anterior a las vacaciones, todo eso se intensifico, así que yo intente jugar muy bien mis cartas, aun no había conseguido follarle el culo, era un terreno prohibido para mí, por más que lo besaba, lo chupaba o jugueteaba.
-Cariño, en estas vacaciones, si queremos hacerlas especiales, tendremos que hacer cosas especiales….
-Jajaja! No, no y no, no me vas a convencer.
-A ver, hay algo que quieras, por lo que podamos intercambiarlo.
-No se, ya me lo has planteado muchas veces, y no pienso en nada.
-Ummmm! Bueno, al menos prométeme que vas a ir con la mente abierta.
-Creeme, que cuando veas todas las cositas que me he comprado no vas a dudar de mi mente.
Eso me pillo desprevenido, aunque era una chica que siempre tenía ropa interior muy sexy, jamás pensé que se habría pedido lencería en exclusiva para las vacaciones, ni que decir tiene que eso me puso muy cachondo para los días que quedaban hasta la fecha.
Por fin, llego el día, después de conducir durante 3 horas, llegamos al hotel, hicimos el check in y colocamos todo en la habitación.
En ese momento me coloque el bañador, porque lo que me apetecía era irme a dar un baño, y pegarme un buen almuerzo con una cerveza muy fría.
En ese momento de espera salió del baño, con un vestido blanco de groche espectacular, cada agujero del vestido que dejaba ver el bikini era aún mejor, jamás se había puesto un bikini así, era de estos que tienen la braguita muy alta y con un tanga que hacía para mi gusto el mejor culo que había visto en mi vida. Normalmente, íbamos de piscina con la familia y ella era muy pudorosa para ponerse bikinis así, por lo tanto, cada vez tenía más en mente que ella tenía tantas ganas o más que yo de hacer aquellas vacaciones muy especiales, había pasado de ser una cosa mía a algo de los dos.
-Joder, Lola, este donde te lo tenías guardado.
-¿Te gusta?, puff me da vergüenza, creo que me voy a cambiar el vestido, una cosa es llevar esta braguita en la playa y otra ir paseando que se me ve todo el culo.
-No, no, no. Ni de coña, te quedas así, y pienso ir 30 cm detrás de ti solo para mirarte, jajajajaja.
-Que vergüenza, bueno vámonos, que estoy muy blanca, a ver si al menos consigo ponerme morenita para esta noche, que tengo otro vestido para estrenar.
El día de playa fue justo lo que necesitábamos, caricias, besos, relajación, tiempo juntos, en general todo lo una pareja que se quiere necesita. Además de verla espectacular, hizo que tuviera una erección el 80% del tiempo que estuvimos en la playa.
-Cari, no veas como estas hoy eh…(mirando hacia mi polla, que no sabía para donde colocármela con un bañador un tanto ajustado del año anterior)
-Si es que me has puesto fatal, ¿cuántas sorpresas quedan como el bikini ese?
-Jajaja, en verdad no tantas, otro bikini de diferente color, un body muy muy sexy de Intimissimi y…me apetece ponerme el vestido que me iba a poner en nochevieja, que es muy sexy y como se canceló, me lo he traído por si vamos a un sitio elegante a cenar.
Tengo que admitir, que el hecho de que se hubiera tomado todas esas molestias en ponerse cosas muy sexys para mí, me estaba poniendo aun más cachondo. No podía parar de sobarla, meterle mano, y además la notaba más o menos en el mismo punto que yo.
Con esa información, estando en la toalla y tirando de tripadvisor, reserve en una terraza espectacular para comer, unos de los mejores sitios de la ciudad, donde podríamos tener una romántica y acabarla con una copita, en otra zona pensada para estar más íntimos, la noche se preveía perfecta.
Una vez en el hotel y antes de prepararnos para salir, nada más salir de la ducha no nos pudimos aguantar las ganas y echamos unos de los mejores polvos de mi vida. En esas me di cuenta que se había traído una cajita donde guarda su satysfayer para usarlo mientras la follaba a perrito, estaba totalmente poseída. Pero lo que me llamo la atención es que en la caja venían más cosas, así que cuando terminamos de follar le pregunte.
-Oye bombón, ¿Qué más cositas te has traído?
-Uhhhh! Mira, cositas, tu no querías hacérmelo pasarlo bien, pues mira todo lo que he pedido.
Un anillo vibrador, unas esposas, unas cuerdas y lo que más me llamo la atención y jamás pensé que se lo vería puesto, era una especie de collar de perro con una correa. Os juro que jamás en la vida pensaba que iba a ver a mi chica con eso puesto.
Con las esposas y lo demás si me lo imaginaba porque alguna vez al volver de alguna boda o algún evento así, ya la había atado con alguna correa y notaba como se volvía auténticamente loca.
Pero esta vez era diferente, esta vez no eran cosas improvisadas, como normalmente pasaba o fruto de dejarse llevar follando, esta vez había planeado todo y además lo traía preparado.
Ni que decir tiene que yo ya estaba igual de cachondo que antes de follar, sentía como mi polla tenía un corazón propio, no paraba de palpitar, pero por desgracia no teníamos tiempo así que comenzamos a vestirnos.
——————————————————————–
-Joder cari, el body no se queda bien con el vestido, se ve por aquí, y aquí y no me gusta.
-Uff es que ese vestido es complicado eh, jajaja como no te pongas dos tiras por sujetador, es imposible que te tape nada.
Era un vestido negro precioso de tirantes, totalmente pegado y que caía por sus piernas con una raja en un lado, y que hacía de las montañas más perfectas en sus tetas y su culo. Si conseguía subir un poquito la raja del vestido, tendría acceso al mundo de fantasía que suponía ese coño para mí, así que.
-Póntelo sin nada debajo.
-¿Cómo? Noooooo, que voy incomoda.
-Anda ya mujer, no es la primera vez que sales sin sujetador, pues ahora, te quitas también lo de abajo, eso porque te lo pido yo.
-Jajajajaja, puff eres muy malo conmigo, bueno, pero… ¿No se me señalan mucho los pezones?
-Uhh! Que va, para nada.
Era una de las mejores mentiras que he dicho en mi vida, el vestido le caía por las tetas casi llegando al pezón, dejando muchísimo escote al aire, y al menos yo, y cualquiera que la viera, se notaba que iba sin sujetador.
Al fin llegamos al restaurante, y conseguimos además que nos cambiaran a una de las mejores mesas de la terraza, unas vistas espectaculares, un poquito más apartados, y cerquita de la música en directo pero lo justo para pasar desapercibidos.
Aunque para Lola era imposible pasar desapercibida para ningún tío que había en la sala, todo el mundo se giraba para verla, y más de uno vi que como se quedaba totalmente pasmado.
El restaurante tenía un poco de todo, gente bien vestida, y luego los típicos guiris con pasta pero que dejaban mucho que desear, así que por así decirlo, los dos íbamos geniales para la noche, yo me puse un pantalón de traje que se que le gusta por que se me marca mucho el paquete y una camisa blanca muy muy suave, además de uno de sus perfumes favoritos.
La cena transcurrió con normalidad, bebimos mucho vino, demasiado y al fin llegamos a los postres, que decidimos cambiarlo por una carta de cocteles.
En esto que nos vino el barman que nos iba a explicar que es lo que habíamos decidido tomar. Cuando se fue a atender otra mesa y nos dejo degustar de unos excelentes cocteles tuve que señalarle a mi novia.
-El pobre no daba pie con bola, jajajajaja, lo has puesto muy nervioso con sus tetas.
-Siiii, yo también lo he notado, ya ni me quería mirar, solo hablaba contigo, y encima tu que no dejabas de hacerle preguntas.
-Jajajajaj estaba disfrutando de la situación, tu te ríes de que el estaba nervioso pero que tu también te has puesto.
-Mira, no sabía donde iba a meterme, y si encima me tapaba con el brazo no quería hacerle pasarlo mal pensado que me había sentido incomoda.
-¿Ah, pero te has sentido incomoda?
-Uh! Para nada.
-¿Seguro?
-Te estoy diciendo que me ha hecho gracia la situación, que no estaba incomoda.
-Perfecto, vamos a verlo.
-¡OYE DAVID! Vuelve cuando puedas.
Le volví a pedir que me explicara algunos cocteles con los que aun tenía dudas y que quería probar, todo haciéndole preguntas a Lola para que tuvieran que hablar entre ellos, el pobre no sabía donde meterse, pero esta vez hay que decir que Lola tomo las riendas de la situación, llegando incluso a inclinarse en la mesa de tal forma, que hasta yo me quede embobado, ni que decir tiene que mi polla seguía bombeando sangre a 1000 por hora.
-Jajajajaj, que mala, esta vez te he pillado haciéndole sufrir.
-Te hacía sufrir a ti no a él, jajajaja, pero vamos, no se si estas disfrutando tu más de la situación que él.
-A mí me está pareciendo divertida la situación ¿No?
Ese ¿NO? Se lo pregunté mirándola a los ojos, y vi que el vino y los cocteles estaban haciendo su trabajo, se mordió el labio de tal forma para asentir con la cabeza que me volvió totalmente loco.
Por desgracia, las 2AM llegaron, y el restaurante se disponía a cerrar la terraza, donde habíamos tenido una velada espectacular.
Cuando ya nos íbamos, fui a despedirme de mi camarero y agradeciéndole el trato, además de darle una buena propina.
-Oye, si queréis seguir tomando algo, podéis ir allí enfrente.
Señalo uno de los típicos chiringuitos de playa convertido en discoteca, pero con una cola inmensa en la puerta.
-Uh lo que menos me apetece es hacer cola la verdad.
-No te preocupes toma, y di que vas de parte de David del “nombre del restaurante”.
-Gracias tío, por todo te doy un 10.
-A vosotros, de verdad y nos vemos luego por allí.
La verdad que, entre saltarnos la cola, pasarnos por un pasillo hasta los reservados, y al ir tan elegantes, había más de un seguridad que nos trataba hasta excesivamente bien, imagino que pensaban que éramos alguien importante.
Yo disfruto mucho bailando, aunque Lola menos, esa noche y debido al alcohol no dejo de darlo todo en el rato que estuvimos.
A eso de las 5 AM, vi a David saliendo de un reservado justo enfrente a donde estamos y se acerco a saludar, se le notaba que el ya había bebido algo y estaba más suelto.
-Hola, me alegro de veros por aquí, que os parece el sitio, también es del mismo dueño que el restaurante.
-Bastante bien, a ver, demasiada electrónica para mi gusto, pero bueno.
-Jajajaj si, es normal, es la moda, bueno tomad, un par de pases más, los podéis usar para pediros otra copa.
Yo la tenía vacía y Lola aguada, así que ella se ofreció a ir a la barra de enfrente a pedirlas mientras yo esperaba con David. En esas, la pobre tuvo que esquivar a por lo menos 4 chicos que intentaron entrarle por el camino o en la barra.
-Madre mía, vas a tener que salir de aquí escoltado con ella, no veas si tiene club de fans.
-La verdad, es que hoy va espectacular, no se porque no viste más así, nos hemos tenido que venir 350 kilómetros lejos de casa para que lo haga.
-Si yo tuviera una novia así, le exigiría por contrato ponerse ese vestido una vez a la semana.
-Jajajajaja Eso tendré que hacer David.
-¿Qué pasa chicos, de que habláis? Toma tu copa, y otra para ti.
-Nada, Cariño, David que dice que el vestido no te queda muy bien, jajajajajajaja.
-¿Si?, pues entonces tendré que quitármelo, y me decís como me queda sin él.
Joder, casi escupo el sorbo de la copa, yo que lo que quería era picarla un poco, y acababa de dejarnos a los dos sin palabras. Fue la manera de decirlo, y como nos miró, desde ese momento supe que en su mente se acababa de imaginar como se quitaba el vestido para nosotros, no me preguntéis como, pero yo lo supe.
Estuvimos haciendo algunas bromas más con David y volvió con sus amigos, en esas yo intente aprovechando que Lola estaba muy cachondo y con el alcohol corriendo por sus venas.
-Cariño…y si ahora después, estrenamos la correa…las esposas…y de paso… ¿hacemos algo nuevo?
-Jajajajaja si te refieres a follarme el culo, NO, jajajajaja.
-Pero porqueeeeeee! Ya tengo ganas solo porque me dices que no, jajaja.
-Ummmm, es que así no me convences.
Era la primera vez, que Lola no decía un NO rotundo, hablaba de que había algo para convencerla, y yo, porque al final los tíos somos así de mal pensados sabía a lo que se refería.
-Ah, pues pídeme lo que quieras a cambio que yo cumplo con mi parte.
-No, no sé, no se me ocurre nada.
-Venga cariño, hay algo que te apetezca hacer, tu pídemelo.
-Que, de verdad, que no he pensado en nada.
-Jajajaja mentirosa, te da vergüenza decirlo.
Yo sabía que tenía una pequeña oportunidad, y fruto del alcohol y de estar tan cachondo estaba dispuesto a todo por follarme ese culo de una vez.
-Venga cariño, si con ese vestido no te puedo decir a nada que no.
-Uh! No será tan bonito cuando David dice que no lo es, jajajajaja.
Que metiera a David en la conversación no era casualidad, y yo lo noté, así que lo único que tuve era que hacer las preguntas adecuadas.
-¿Qué pasa te has creído que a David no le gusta tu vestido?
-Jajajja, Cariño, no es que no le guste, es que le encanta, no deja de mirarme desde que llego, me come con los ojos.
-Uh, ¿y no te sientes incomoda?
-Ufff, que va, lo que estoy es muy cachonda.
-Ummmm, te propongo un cambio, invitados a David a echar la ultima copa en la habitación, pero a cambio yo te voy a follar el culo.
Por fin lo solté, y sé que ambos estábamos pensando en lo mismo.
-Pero, ¿a follar?
-Que pasa, ¿No has soñado nunca con que te follen dos tíos? ¿En ninguna noche sola con el satysfayer?
Me puse detrás de ella, pegando mi polla a su culo.
-Ufff, no se.
-¿Quieres que te follemos los dos o no? Yo ya he pedido lo que quiero, pide lo que quieres tu.
-Si, dios, estás loco.
-Estamos jajajajajaja, voy a decirle algo a David, lo mismo es el, el que nos dice que no.
Me acerque y cuando el pensaba que iba a despedirme, le dije que nos había caído muy bien a los dos, y que íbamos a echar una copa en la habitación del hotel, mientras se lo decía le agarre del hombro y señale a Lola, no hizo falta decir más, ambos sabíamos a lo que me refería, me comento que iba a llevar a dos amigos a casa y que en 15 min estaba allí.
Al final entre que nosotros íbamos andando y esperamos las colas para salir del local, cuando llegamos David estaba en la puerta del hotel esperando.
-Hola chicos, joder que aguante, todavía tenéis ganas de beber más.
-Bueno, ahora empieza lo mejor, le toca a lola ser la camarera jajajaja.
Subimos al hotel y mientras hablábamos de que música poner David y yo, Lola nos preparo unas copas, tenía que conseguir romper el hielo cuanto antes, desde que salimos del local Lola no había abierto la boca, no estaba seguro de si iba a arrepentirse, así que como no sabía que decir, cuando me trajo la copa, la agarre de la cintura y empecé a comer la boca como para follarla ahí mismo delante de David.
Cuando me separé, vi que se estaba mordiendo el labio, la había recuperado, así que le di la vuelta mirando a David, que observaba la escena muy cerca pero quieto, y yo me agaché a subirle el vestido y meter mi cabeza en ese culo que me volvía loco.
Por suerte David pillo la indirecta y se acerco a besar a Lola, al principio todo muy quieto, pero luego vi como iban cada vez comiéndose la boca más y más y el empezó a sobarle las tetas también.
Me levanté y empecé a quitarme ropa y empecé a picar a Lola.
-Bueno cariño, ¿no te ibas a quitar el vestido para nosotros?
Seguía sin hablar, pero se rio, se puso frente la cama, se quito el collar, los pendientes y los anillos, nosotros nos sentamos en la cama, yo ya estaba en calzoncillos y David en camiseta, y Lola nos ofreció el mayor espectáculo que han visto mis ojos, no se como cojones ese vestido mantenía a raya ese cuerpo.
Me quede totalmente desnudo y David igual, siempre iba un pasito por detrás de mí, imagino que no quería pasarse de la raya, en eso se lo agradezco nos hizo sentir muy cómodos a los dos.
No es por exagerar, pero juraría que ese día mi polla podría medir más que nunca en mi vida, o al menos yo la veía así, y aunque David gastaba una buena polla, tengo que decir y luego me ha admitido Lola que la mía es más bonita y más grande.
Y cuando yo pensaba en como conseguir tener a mi novia de rodillas comiéndonos las pollas, fue ella la que no tardo ni 10 segundos en ponerse de rodillas delante de mí, y empezó a hacerme la mejor mamada de mi vida, estaba totalmente poseída, y cuando agarro una con cada mano, tenia la boca llena de saliva y los ojos totalmente abiertos, tengo que decir que esa imagen no la olvidare en mi vida.
Estuvo así durante unos minutos, hasta le salió una risa de loca, que me puso muy cachondo, ella había entrado en ese modo cachonda donde la había visto tantas veces mientras follamos, pero nunca así. David se tumbó y ella siguió comiéndole la polla y metiéndosela entre sus tetas, yo solos los escuchaba respirar, ya que yo me fui directo a mi objetivo, me coloqué detrás de ella y empecé a comerle el culo, y junto con un lubricante que llevaba preparado empecé a preparar ese culo para lo que le venía.
Mientras iba cambiando entre comerle el culo y follar a perrito por el coño, con la primera embestida pensé que los vecinos iban a venir a llamarnos la atención, nunca había oído a Lola gemir así, pero es que su coño parecía un grifo, estaba totalmente chorreando y 50 grados. Sabía que estaba apunto de correrse, así que aprete el ritmo hasta que paro de chillar y se puso a temblar.
David que, viendo la imagen, pensaría que el también quiere así que cuando yo la saque y me levante para dejarla respirar después del primer orgasmo, se la coloco encima de espaldas. Lola no necesito más, se puso a cabalgar como una diosa, sabía que había llevado a aquel chico para follarlo como nunca y no lo iba a dejar pasar, yo mientras disfrutaba de verla botar me puse de pie en la cama y se la iba metiendo en la boca cuando ella intentaba respirar, la agarraba del cuello y la miraba fijamente, era nuestra y ella lo sabía.
Pararon porque David pidió casi gritando ¡Para! ¡Para! Estaba apunto de correrse, y acostumbrada a mi que me gusta que me la chupe hasta que me corra, se bajo como una perra para chupársela, pero David no quería, imagino que no querría correrse aún.
Yo aproveche para ponerla boca abajo, y echarle un chorreón de lubricante.
-¿Ahora te toca cumplir con tu parte del trato?
-Siiiii
-Si, que.
-Que me lo folles.
-¿Qué te folle el que?
-Que me folles el culo.
-A sus órdenes cariño.
Y no hizo falta mucho, entre los dedos que tuve antes, el culo totalmente cubierto de lubricante, y lo dura que estaba mi polla, la fui metiendo muy poquito a poco. En un par de minutos tenía a lola cabalgando con el culo, parecía que llevaba toda la vida follando por culo, era una diosa y ella lo sabía.
David mientras se volvió a colocar de rodillas y le puso la boca en la polla, la imagen era digna de una de las mejores películas porno, no le dábamos ni 10 segundos de descanso, ahora los poseídos éramos nosotros, y a Lola solo le quedaba recibir por parte nuestra.
En eso que le pregunte.
-Cariño, ¿Quieres que te follemos a la vez?
-Siiiii, sii….(apenas sin respiración)
-Eso es muy muy de perra, pero como veo que te has comprado hasta un collar, es que lo eres no ¿no?
-Siiiii.
-Si,que.
-Que me folleis los dos (y mientras que decía esa frase, ella empezó a tomar las riendas de follarle el culo).
Me aparte y deje que David se tumbara y ella se pusiera encima, Lola estaba chorreando en sudor, en lubricante, y en flujos de su coño. Me puse encima y aunque conseguimos metérselas después de algunos gritos por su parte, no conseguíamos estar en sincronía para follarla bien, imagino que una cosa es verlo en una película y otra hacerlo.
Aun así me aparte un poco y de un par de embestidas, Lola consiguió que David se corriera, y yo la cogía la puse frente a la pared, y termine de follarla a perrito mientras le pegaba palmadas en el culo, se que eso le encantaba, y vi como empezaba a temblar.
-Me corro ya cariño, pufff.
Se puso de rodillas y empezó a comerme la polla, siempre me corría en sus tetas. Pero esa vez empezó a chupar sin parar con más y con más fuerza, quería tragárselo todo y no me quitaba los ojos de encima.
-Pufffffffffffffff, dios, me corro.
Fue increíble, Lola de rodillas, temblando, sus piernas y su voz no paraba de temblar, David casi se acaba la copa de un trago y yo fui a por una toalla al baño.
Nos terminamos la copa entre risas, recordándole lo perra que había sido y la vergüenza que le estaba dando, David se despidió, quedamos en volver al restaurante antes de irnos, pero no conseguí convencer a Lola.
A día de hoy, si en algún momento sale el tema mientras follamos, Lola entra en éxtasis y folla como una loca, pero aun no la he convencido para volver a repetirlo.
Desde ese día, para Lola follar por el culo es rutina en nuestra relación, imagino que le trae muy buenos recuerdos perder la virginidad anal una noche así.
Es difícil encontrar un equilibrio entre, seguridad en la pareja, no tener celos y tener el sexo como disfrute, pero si se consigue, se llega al cielo.
Fin.
Por TripleAAA2
