Domingo 4 de mayo de este año, me despierta una llamada de mi sobrina, ¿y me dice “Hay alguien allá abajo?”, un poco desconcertado me doy cuenta de que mi esposa y mi hija no estaban, Salí del cuarto y afuera no estaba nadie, “parece que no están” le dije, ella me dijo “Se fueron todos a la misa, se acaban de ir, van a regresar hasta dentro de 2 horas”, el mensaje era claro, una de esas oportunidades que no se dan muy seguido, gracias a la misa me iba a culear sin prisa a mi sobrina, esto era autorizado por Dios.
Contexto rápido, llevo ya casi 1 año culeándome a la sobrina de mi esposa, ella cumple 15 en junio, es una chaparrita costeña morena de pelo lacio, nalgona y piernuda por naturaleza, una cara muy bonita, me costó 6 meses de persuasión, pero al final accedió primero a darme el culito, y ahora le puedo dejar la leche dentro de la vagina en la primera semana después de su periodo.
Me metí al baño, me lavé la cara, los dientes, tomé la vaselina y me subí al cuarto de ella, que ya estaba esperándome solo con ropa interior bajo la sabana.
El acceso a la casa es por un portón muy viejo, el cual al abrirse hace mucho ruido, así que si alguien llegaba nos daría tiempo suficiente para ocultar lo que se estuviera haciendo.
Me metí con ella bajo la sabana, me desnude también mientras le daba unos besos bien ricos, le baje el calzón y ella ya estaba mojadita y mi verga bien dura, solita se bajó y me la empezó a mamar, pero le falta práctica porque no lo sentí muy placentero, así que le dije que solo dejara que le metiera la verga lo más dentro de la garganta (como le hago a mi esposa) pero no le entro mucho, le daban ganas de vomitar así que ahí le paramos, cambiamos lugares y yo le empecé a mamar su panochita que por cierto la tenía bien rasurada y se me antojo un chingo, “Ya métemela” me interrumpió y me subí a sus tetitas mientras le ajustaba la verga para entrar en su panochita.
Se la deje ir suavecito, pero a los pocos segundos de estarla penetrando ella dijo que ya porque ya había pasado una semana de su periodo, se la saque y ella se puso boca abajo y con sus manos se abrió las nalgas y le pude ver como pocas veces con luz del día ese culito caliente y delicioso, le puse vaselina, pero ella me dijo que le pusiera muy poquita porque no había prisa, le puse la cabezota de la verga en su culo y se sentía calientito y rasposo y muy limpio, ella sabe que antes de culear debe estar bañadita, se la deje ir poco a poco, ya que sin vaselina no se le va tan rápido,
¡Ya la tenía toda adentro y ella solita bajaba y subía el culo, se sentía bien rico, la sujeté y la puse de ladito y empecé a darle duro a la pinche enana, después la rodé sobre mí y ella estando sobre mí le empecé a dar, ella se quejaba y decía “NO, NO, NO, NO!”, me detuve, pero al hacerlo fue ella que empezó a matarse y yo no lo soporte, la agarre de la cadera para ensartarla lo más que pude y le solté toda la leche dentro del culo, ufff hasta la última gota le deje ir, la puse de costado y la abrace hasta que la verga se me desinflo y se le salió del culo.
¿Estábamos abrazados de cucharita y apenas eran las 7:40, todavía teníamos cerca de una hora, le pregunté “Mami te gusta más por la panocha o por el culo?”, ella lo pensó un poco y me dijo “es que por el culito se siente más rico y siento como me inflas cuando me echas la leche”, “mami y te viniste?”, ella dijo “estaba a punto de venirme, pero te viniste tú”, le dije “dame 5 minutos para que se me pare y te hago venir por el culo”.
Y si, se me paro la verga y de ladito se la metí otra vez, y le entro bien fácil, nos acomodamos para que ella estuviera boca arriba y yo atravesado con mi verga en su culo, ella comenzó a masturbarse, tenía una cara que lo estaba gozando, le empecé a dar duro y ella se mordía los labios, hasta que me agarro el brazo con una mano supe que ya se estaba viniendo, pude sentir con la verga cada contracción que hacía con el culito y como se chorreaba por la panocha, le agarre la tetita y pude sentir su corazón al 1000, mi niña estaba bien complacida.
Pero mi verga ya estaba lista para otra carga de leche, la puse boca abajo, ella ya no hacía nada, estaba a mi merced, se la metí en ese culito y sobre ella le empecé a bombear hasta que lo rasposito de ese culito me hizo llenarlo de leche nuevamente.
Me le bajé, ¿me vestí y le dije “Bien llenita mami?”, y no me dijo nada, solo me hizo “Like” con la mano y se arropó.
Me bajé al cuarto, me lave la verga y a dormir, porque nada puede hacerte dormir mejor que dos vaciadas de leche en el culito de una muchachita, desperté como a las 10 am y ya estaban todos en la casa y ella ya estaba abajo con los demás porque la escuche riendo muy fuerte, a qué niña mi sobrinita.
Por josueang
